A muchos les gusta dormir a pata suelta, soñando con pajaritos preñaos y/o un futuro mejor. Pero hay otros que tienen los pies supuestamente bien puestos en la tierra y no quieren perder tiempo con sueños y boberías. Así que la pregunta de hoy es "¿Soñar o no soñar?".
Hay varias personas en esta sociedad ultra-rápida, materialista y de una competencia cada vez más acelerada para los cuales el día de 24 horas no les da. Estos casi siempre se la pasan bebiendo café y tomando estimulantes porque creen que perder tiempo durmiendo es imperdonable. Pero este remedio milenario contra el sueño y el dormir solo funciona un ratito pues el cuerpo eventualmente se cobra la falta de sueño. Parecería que por alguna extraña razón nuestro cuerpo requiere un descanso, y por tal razón se evolucionó este extraño mecanismo de que nos dé sueño y nos tengamos que dormir tarde o temprano.
Pero una pregunta interesante en biología es ¿porqué nos da sueño? ¿Y porqué necesitamos dormir tanto tiempo? Si todos dormimos las 8 horas requeridas pasaremos dormidos una tercera parte de nuestras vidas. Cuando la vida era lenta y no pasaba mucho en meses pues esta era una buena y agradable manera de pasar el tiempo. Por eso inventamos en aquellos rústicos tiempos las siestecitas y el dormir hasta tarde los domingos. Pero en esta vida tan agitada de la modernidad donde debemos hacer malabares para armonizar entretenimiento, trabajo, familia y la búsqueda del billete para muchos eso de estar tiraos en una cama por 8 horas sin hacer nada es casi un crimen.
Pero unos científicos de UCLA en California parecen haber encontrado la cura al sueño. Así como lo oye. En este interesante artículo de la revista WIRED el Dr. Jerome Siegel y sus colaboradores parecen haber encontrado el mecanismo hormonal que sirve de gatillo biológico para que el cerebro desarrolle los síntomas del sueño que afectan toda la conducta cognoscitiva del organismo cada día, y que si no se satisface con suficientes horas de sueño persiste hasta que el cuerpo finalmente se duerma o caiga catastróficamente ante los síntomas del cansancio. Pero al igual que muchos otros mecanismos biológicos esta conducta de "tener sueño" empieza y termina al apretarse los interruptores biológicos correctos que la evolución ha diseñado para estos propósitos.
Según Siegel este interruptor del sueño es la hormona denominada Orexin A. En estudios con monos a los que no se les ha dejado dormir por varios días cuando se les da la hormona pierden todos los síntomas del sueño, y pueden tener los mismos resultados en pruebas de inteligencia y estados de alerta que si hubiesen dormido. Esta hormona podría ser la "cura del sueño" pues parece ser natural, inofensiva y permitiría a las personas el estar despierto las 24 horas sin efectos secundarios ni pérdida de capacidades mentales. Este estudio, como es natural, está siendo apoyado por el ejército y el Departamento de Defensa de los EE.UU. porque les permitiría tener soldados robot mucho más eficientes que no tuviesen que dormir en misiones extendidas. Y supongo que a muchos dueños de corporaciones multimillonarias eso de tener empleados que puedan trabajar días de 16-20 horas sin dormir cuando viene un "deadline" debe ser un prospecto en extremo halagador.
Pero con todo y lo socialmente peligroso que esto pueda parecer, eso de tener una pastillita que nos permita aprovechar las 24 horas del día hasta el cabo sin tener que dormir parece algo interesante. Claro, hacen falta muchos años más de estudios y experimentos antes de que la FDA apruebe algo así. Y aún más para ver cuales serían los efectos a largo plazo de estar años sin dormir (que seguramente debe haber varios que ni nos imaginamos). Además un efecto secundario de este Orexin A es que estimula el hambre, y los que nunca duermen van a entonces perder tiempo comiendo de más y terminando super gordos (a menos que encontremos otra pastilla para detener el hambre).
Pero supongo que en la sociedad de "workaholics" americanos no faltarán voluntarios para estos estudios…