martes, 24 de junio de 2008

Como votar de manera científica y racional

Ya se están acercando las elecciones generales en Puerto Rico y los Estados Unidos. Los votantes tendremos que escoger los gobernantes, legisladores y funcionarios públicos que decidirán como correr el país, gastar el presupuesto gubernamental y manejar la economía. Estos gobernantes a su vez designarán jefes de agencia y jueces del Tribunal Supremo que configurarán a quienes se le dan servicios del gobierno, donde se cortará el presupuesto, que cosas se considerarán legales, a que funcionarios corruptos se procesará, como y a quien se le declarará la guerra, y muchas otras decisiones fundamentales que afectarán el futuro de estos países y del mundo.

La democracia, según se practica en estos países y en casi todo el mundo de culturas europeas-occidentales, se basa en que cada persona escoja gente para estos puestos de gobierno que represente su forma de pensar y como ellos decidirían sobre estos vitales asuntos. Cuando se inventó el concepto de democracia en las pequeñas ciudades-estado de la Antigua Grecia, donde solo votaban los hombres con tierras y propiedades, se preguntaba a todos los votantes si ir o no a la guerra, si imponer o no un impuesto, si emprender o no la construcción de un gran edificio, etc. Todo el mundo votaba sobre issues particulares y un consejo ponía en práctica la decisión de la mayoría.

En países modernos de millones de habitantes la democracia no funciona así. Casi ningún issue o decisión particular del gobierno se consulta directamente a los votantes, (aunque la opinión mayoritaria a través de encuestas y medios de comunicación masiva tiene un leve peso a la hora de decidir mientras más cerca estén las elecciones). Ahora elegimos una plantilla de "líderes" que manejan un ejército de burócratas semi-profesionales que por 4 años hacen lo que les da la gana (dentro de los límites que imponen las leyes y la Constitución). Se supone entonces que los votantes pasemos juicio sobre TODAS las ejecutorias del gobierno durante los últimos 4 años y decidamos si nos gustaron o no en su conjunto. Así sabremos si cambiar a la gente que ostenta los puestos electivos o dejar a los que ya están. Está es una manera burda y diluida de decidir pues la persona inteligente promedio puede estar de acuerdo con unas decisiones del gobierno, ser indiferente a otras, y no gustarle otras más. Queda entonces de parte del votante prioritizar sus preferencias, decidir a quien echarle la culpa o alabar por estas decisiones, y decidir quien cree que lo haría mejor en el próximo cuatrienio.

Esto no es tarea nada fácil en nuestras sociedades modernas, interdependientes y complejas. Un votante serio e inteligente se SUPONE que

  • haya estado al tanto de las decisiones tomadas por el gobierno en el pasado.
  • haya cualificado y ordenado los efectos de dichas decisiones de acuerdo a prioridades racionales.
  • entienda cuanto de estas decisiones del gobierno se debe a los actuales gobernantes y cuanto a factores externos fuera de su control.
  • conozca todos los programas de gobierno y propuestas alternativas para los próximos 4 años entre las cuales debe decidir
  • evalúe y decida cuales de estas son más importantes y de beneficio para la mayoría del país, (y no necesariamente para uno como persona particular)


Creo que no es sorpresa para nadie el hecho de que hoy día en nuestros países CASI NADIE HACE ESTO antes de decidir por quienes votar. Lo que casi siempre termina ocurriendo es que los aspirantes a puestos electivos en el gobierno se organizan en partidos políticos que venden sus propuestas de cómo correr el gobierno mediante anuncios, noticieros, programas de radio y TV, fiestas, caravanas, concentraciones, cancioncitas y regalos. El votante entonces escoge de entre estos partidos políticos al que más se parezca a su ideología personal, al que tenga uno o más candidatos carismáticos que se hayan vendido bien y abundantemente, o al que le haya regalado un puestecito, le haya provisto algún servicio recientemente o le haya regalado alguna chuchería que quería. O a veces como detesta al que está ahora en el gobierno, pues lo culpa de su actual infortunio, pues decide votar por el partido que tenga una mayor oportunidad de desbancarlo para castigar a los que lo hayan hecho mal, aunque no crea en ninguna de las propuestas e ideologías de los que va a trepar ahora en el gobierno.

Yo, aunque soy candidato a la Legislatura de Puerto Rico por un partido político, no vengo a decirles en este artículo que voten por mí o por ningún candidato en particular. Primero, porque el 95% de los puertorriqueños a los que este llamado le aplicaría no me van a hacer caso no importa lo que escriba. Y segundo, porque creo sinceramente que NADIE debe votar basado en lo que le diga otra persona, sino usando su criterio propio luego de un análisis racional. Así que este artículo es el primero de una serie donde les proveeré de un corto manual de instrucciones sobre como usar el método científico para poder decidir de la manera más correcta y sabia posible por quien votar en unas elecciones. Porque creo que la lógica y la ciencia se deben usar para cosas útiles en nuestra vida y nuestra sociedad, y que sirven para mucho más que simplemente aprender (porque nos obligan) en la escuela o universidad una versión aguada de sus más recientes resultados.


Manual del buen votante


Paso #1. Averigue por cuantos funcionarios a puestos de gobierno tiene Ud. derecho a votar. Cuales son sus poderes, prerrogativas, obligaciones y sobre que asuntos importantes van a tener que tomar decisiones los próximos cuatro años. (En Puerto Rico un elector tiene derecho a votar por el Gobernador, un Comisionado Residente [inútil] en Washington, un representante y un senador por acumulación, un representante del distrito en que vive, dos senadores de la región geográfica donde vive, un alcalde y hasta 13 asambleístas municipales del municipio en que vive).


Paso #2. Vaya a los comités municipales de todos los partidos políticos que están inscritos donde usted viva y pídales copia del "Programa de Gobierno" que especifique claramente que cosas estos partidos (es decir, los funcionarios de ese partido que salgan electos) intentarán poner en práctica, sea como mayoría o como minoría, en los próximos 4 años. Si es vago, puede ir a Google y buscar los programas de gobierno de los partidos por Internet. Pero asegúrese que son oficiales, y no la versión distorsionada de algún internauta fanático de esos partidos. Claro está, no los busque para coleccionarlos. Léalos todos con cuidado.


Paso #3. Escriba en un papel (o en un procesador de palabras en su computadora) los asuntos en los que el Gobierno afecta su vida y la vida de todos los ciudadanos de su país. Asuntos como impuestos, acceso a empleos, salud, educación de sus hijos, estado de las carreteras, vigilancia pública, drogas, criminalidad, status político, guerra, energía, protección ambiental, acceso a playas y recreación, deportes, y otros que para usted sean importantes y se me hayan quedado en esta breve listita incompleta. [P.S.: En una colonia como Puerto Rico esto es más fácil de lo que parece. De forma engañosa nos quieren hacer creer que nuestro gobierno insular tiene poder de decisión sobre muchas de estas cosas importantes cuando en realidad no lo tiene. Pero esa es harina de otro costal.]


Paso #4. Use un programa de cálculo como Excel o cualquier otro "spreadsheet", y asígnele puntos (valores numéricos, no palabras inanes y confusas como "importante" o "trivial") a cada problema de la lista anterior que le interese de acuerdo con cuanta importancia tiene para usted y cuan decisivo es este issue a la hora de decidir por quien votar. Si usted está desempleado y el que se creen e incentiven nuevos empleos es de la mayor prioridad para usted, póngale un 10. Si le molesta lo cara que está la gasolina y entiende la necesidad de buscar alternativas energéticas al petróleo, póngale a eso un 8. Si no tiene niños en la escuela pública y cree que pisotear los derechos de los maestros no es tan importante, póngale un 4. Si usted es una papa de sofá ("couch potato") y no le importan los deportes y ni le va ni le viene que el alcalde haya puesto una cancha cerca de su casa, póngale un 1. Y así sucesivamente. Trate por favor de pensar en los otros ciudadanos y sus necesidades, no solo en las suyas.


Paso #5. Por último, (y es importante que está sea la ÚLTIMA PARTE luego de haber hecho las 4 anteriores), haga una tablita en su "spreadsheet" para cada candidato. Ponga el nombre de cada candidato y haga las siguientes columnas asignando un número a cada una. Puesto al que aspira (los puestos cuyas decisiones afecten a más gente y al mayor número de los issues del paso 3 deben tener un número mayor). Educación y experiencia del candidato (mientras más tenga de ambas y más relevante sean a su puesto dele un número mayor). Jingles de campaña & anuncios de Radio y TV (Este es un número negativo. Mientras más pegajosos sean y más gaste el candidato en metérselos por ojo, boca y nariz en vez de debatir ideas quítele más puntos). Propuestas del candidato o su partido (en cada uno de los issues del Paso 3 asígnele más puntos a las ideas y propuestas que le parezcan más inteligentes e innovadoras. Multiplique estos puntos por el peso que le asignó a ese issue en el paso anterior. De las 5 columnas esta debe ser la que más puntos tenga). Consistencia con su récord anterior en puestos de gobierno presentes o pasados (este criterio es muy importante ya que los políticos son unos seres embusteros y embaucadores por naturaleza. Quítele puntos si promete cosas que pudo haber hecho antes y no hizo. Quítele más si le ha mentido antes y está prometiendo hacer lo opuesto de lo que antes hizo. Dele puntos si ha defendido y hecho lo mismo consistentemente a lo largo de su carrera).


Paso #6. Sume las 5 columnas para cada candidato y vote por los candidatos a cada puesto que hayan obtenido la puntuación más alta, NO IMPORTA A QUE PARTIDO POLÍTICO PERTENEZCAN.

Si todos siguiéramos este procedimiento racional y numérico, veríamos que nuestro país y su economía mejorarían de forma exponencialmente rápida. Acuérdese que el cambio comienza por cada uno de nosotros.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

El problema reside en que NO IMPORTA QUE UNO HAGA PARA VER QUIEN ES EL MEJOR "CIENTÍFICAMENTE" HABLANDO, TERMINAN SIENDO IGUAL DE CHARLATANES. Es como los profesores en la universidad, que a chicas tontas pero simpáticas, con un traserito grande, le dan una buena nota. O los jefes de alguna empresa, le dan prioridad a sus secretarias bonitas y a empleados batatas alcahuetes. Ahi es que comienza la prostitución intelectual y el despilfarro de fondos públicos. ;-)

Anónimo dijo...

Sinceramente yo no voto, considero que es una perdida de tiempo ir a votar por personas que no van hacer nada por Puerto Rico, sólo empeorarlo. Asi que para no perder el voto mejor no voto. Los políticos enamoran al pueblo con promesas, claro para q voten por ellos y a la hora de la verdad no hacen nada, sólo ocupar una silla más en el capitolio. Considero un poco más digno al partico PIP, pero la realidad es que no ganana nunca proque PR es PNP o PPD. Asi que si voto por PIP tambien perdería el voto. En fin, mejor no pierdo ni tiempo ni voto.

Anónimo dijo...

Bueno profe...
Yo no vuelvo a botar hasta que la mayoria deje de botar por partidos y comienzen a botar por candidatos.

En las elecciones anteriores fui a botar con la simple desicion ke el peor no ganara. hablo de aquel ke se salvo de chiripa de ir a la carcel, increible que el que se encarga de governar no supiese lo que hacian tos los que estaban bajo su cargo. Tampoco le di el voto al otro idiota que gano so en resumidas cuentas me quede con lo que pense era la mejor opcion. Como uds dijo... aunque la mayoria diga lo contrario si estoy bien lo estoy jajaja aunque "pierda el boto".

De igual forma NINGUNO me representa! haran lo que les de la gana una vez ganen y pasen las demoniacas elecciones! Pluss si no voto me sacan de la horrible lista esa de donde sacan los posibles candidatos a jury duty.

Cuando y si se arregla esto de que la mayoria de la gente bote algarete, yo volveria a botar.

(FYI: el candidato por el PIP a la alcaldia de San Juan, es mi primo y ni aun asi votare)